Resistencia popular en el sur

15/11/2019
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Manifestación en La Paz por la renuncia de la presidenta autoproclamada (15/11/2019)
Foto: Telesur
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En la actualidad a través de medios de comunicación alternativos, de redes sociales y las mismas agencias de prensa internacionales mercantiles y neoliberales, nos informamos acerca de las convulsas protestas sociales que ocurren en estos momentos en Bolivia y Chile, dos países hermanos de América del Sur.

 

Sabemos y entendemos que las causas, el origen y la fuente de los conflictos existentes, son distintas en cada uno de los países citados, pero tienen en común la capacidad de movilización, la masiva protesta y resistencia popular al actual estado de cosas.

 

En el caso de Bolivia, el reclamo popular, las protestas y las movilizaciones ocurren luego del Golpe de Estado dirigido por el alto mando del ejército boliviano, para forzar la renuncia de Evo Morales, Presidente Constitucional y con eso, revertir el proceso de cambio social, político, económico y cultural impulsado por el régimen de Morales. En las elecciones del 20 de octubre 2019, Morales obtuvo la mayoría de votos en primera vuelta asegurando la reelección para un nuevo mandato, pero los intereses imperialistas, la oposición política conservadora y las élites económicas nacionales alegaron “fraude”, lanzaron a la calle a sus falanges para provocar caos y violencia e instruyeron a generales y coroneles para dar el mencionado golpe a la democracia.

 

Morales renunció y en medio de los disturbios, su residencia, la de su hermana, ministros y otros funcionarios del Gobierno fueron allanadas, saqueadas e incendiadas. Para preservar su vida, la de familiares y funcionarios, el Presidente Evo Morales acepto el ofrecimiento de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, quien respondiendo a la tradición política histórica ofreció asilo y protección al Gobernante boliviano quien ahora se encuentra en México.

 

Mientras, la tensión social aumenta en Bolivia debido a que la abogada conservadora y opositora Jeanine Añez Chávez, Vicepresidenta del Senado, se autoproclamó Presidente del país con el respaldo del alto mando militar, ¿cómo así?, sí ella misma, decidió ser la nueva gobernante. En las principales ciudades bolivianas se escucha el clamor popular exigiendo la renuncia de la usurpadora y el retorno del Presidente Evo Morales. Se informa de rebeliones de soldados desconociendo al Alto Mando, negándose a reprimir al pueblo, se advierten movilizaciones de miles de indígenas, campesinos, trabajadores, sindicatos, gremios que se dirigen hacia La Paz, capital del país y centro del Poder político a expresar descontento por el acto de Añez Chávez y exigir el regreso del Presidente Morales. Lo que está claro es que el conflicto político social está escalando, para estabilizar la situación y alcanzar la paz social se requieren soluciones inmediatas y así, evitar más confrontaciones violentas. Confió que al final, los pueblos decidirán su mejor destino.

 

En Chile, el presidente derechista Sebastián Piñera enfrenta desde hace 28 días una crisis política y social originada por el aumento al precio del transporte público que ha derivado en el reclamo de millones de habitantes exigiendo una nueva Constitución Política y mejores condiciones de vida. Piñera dio marcha atrás en el aumento al transporte y ha aceptado la necesidad de un nuevo pacto social, decisión que no ha sido suficiente para aplacar el descontento popular, continúan las manifestaciones y se perfila a corto plazo un paro general. Los acontecimientos están en desarrollo, no es tiempo de especular sobre el fin de los acontecimientos o el destino del régimen. Lo mejor es seguir atentos.

 

Guatemala, 15/11/2019

 

-Factor Méndez Doninelli es maestro e investigador, consultor en Derechos Humanos y métodos alternativos de resolución de conflictos.

 

https://www.alainet.org/es/articulo/203292
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