Chile: 144 mapuches procesados

12/09/1996
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Foto: selvasorg.blogspot.com
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En Chile, la relación del Estado con los pueblos indígenas está muy tensa: 144 mapuches están siendo procesados bajo el cargo de usurpación de tierras. Pero éstos replican: los pueblos indígenas "nos seguimos reservando el derecho de que no hemos renunciado a nuestras tierras, por lo tanto sigue prevaleciendo ese derecho y lo hacemos visible a través de la toma de tierras", según expresó José Naín Pérez, dirigente del Consejo de todas las Tierras, en el diálogo sostenido con ALAI que transcribimos a continuación.

 

¿Cómo se presenta la situación de los indígenas en Chile, bajo el gobierno del presidente Frei?

 

La situación de los mapuches es muy complicada. Hay que considerar que salimos de una dictadura militar muy dura en donde los mapuches fuimos víctimas de la represión, fuimos víctimas de la usurpación de nuestras tierras. Sin embargo hoy día, en democracia, la situación se ha complicado más aún para nuestro pueblo. Por decir algo, hoy día el Estado, de manera organizada, ha querido intervenir en el futuro de nuestro pueblo mapuche, promulgando una ley indígena, la ley 19.253. Yo creo que esta ley se funda desde los intereses propios del Estado cuyo único objetivo es intervenir en el accionar político de las comunidades indígenas de Chile.

 

En concreto, ¿esa ley cuándo fue expedida y qué es lo que plantea?

 

Esta ley fue promulgada el 93. El Estado ha dicho que es una ley indígena, sin embargo hemos planteado que no es una ley indígena sino una ley del Estado para los indígenas. En ese sentido la ley no reconoce el derecho a territorio, no reconocen los derechos que tenemos como pueblo, sino que reconoce el derecho como comunidades indígenas, y una comunidad no tiene los mismos derechos que un pueblo. Es decir, no reconoce el sistema jurídico, judicial y concepción del derecho que tenemos los pueblos indígenas, no reconoce el derecho político, el derecho a una autoeducación propia como indígena; es más bien una ley intervencionista desde el punto de vista jurídico y político.

 

Esta ley ha sido promulgada bajo el peso del neocolonialismo, de la presencia de las multinacionales en nuestro país; pues en este momento abre paso para que el Mercosur pueda aprovecharse de los artículos de la ley para apropiarse de las tierras de los indígenas, y lo mismo se puede decir respecto al Tratado de Libre Comercio. En este sentido es una ley concebida en razón de los convenios multieconómicos que iba a establecer el gobierno chileno a partir del año 1993 en adelante. De ahí nuestro cuestionamiento a esa Ley.

 

¿Qué acciones está tomando el Consejo de todas las Tierras frente a esa ley?

 

En este momento nosotros estamos enfrentando un conflicto de tierras, que se ha venido generando por la presencia de las forestales transnacionales, y aquí el Estado tiene mucho que ver. Nosotros iniciamos un proceso de recuperación de tierras, en base a nuestro derecho ancestral como mapuches, ya que el Estado no reconoce la tierra usurpada que es una gran cantidad de los mapuches.

 

Hemos movilizado a las comunidades, y el año 91-92 nosotros nos apoderamos de 25 propiedades de particulares que nos significó una querella judicial de parte del gobierno y hoy día nos encontramos procesados 144 mapuches, desde 61 días a 541 días de cárcel, aunque últimamente la Corte Suprema ha bajado el plazo y eso significa que en cualquier momento van a comenzar a citar a la gente y luego a encarcelar.

 

La situación en Chile es muy particular, porque en Chile todo tiene dueño, medio metro de tierra se tiene que pelear porque tiene dueño. Entonces jurídicamente es una situación muy compleja para nosotros, pero hay que considerar que los pueblos indígenas, en particular los mapuches, nos seguimos reservando el derecho de que no hemos renunciado a nuestras tierras, por lo tanto sigue prevaleciendo ese derecho y lo hacemos visible a través de la toma de tierras. Nosotros hemos recuperado aproximadamente 500 has. de tierras, no es mucho visto desde otros países, pero en Chile 500 has. es mucha tierra, dada la situación jurídica en que se encuentra la tierra, es muy difícil recuperar.

 

Ud. me hablaba de que en Chile hay 144 dirigentes indígenas que se encuentran enjuiciados por el poder judicial ¿cómo se encuentra este proceso?

 

Efectivamente son 144 mapuches que están siendo sentenciados en este momento por el tribunal chileno.

 

Este proceso se inició el año 92 con el proceso de restitución de tierras que iniciamos como Consejo de Todas las Tierras con las comunidades mapuches. Entonces el gobierno del interior y el intendente de la novena región establecieron una querella en contra de la organización mapuche y se puso un ministro fiscal para que investigara a la organización y su accionar. Esto llevó al ministro a citar una gran cantidad de mapuches, dispuso una orden de arraigo, ordenó el allanamiento de las comunidades, ordenó el allanamiento de nuestra sede, se llevaron todos los materiales que teníamos recopilados hasta esa fecha.

 

Entonces los cargos que nos imputó el ministro fiscal fueron de asociación ilícita y usurpación de tierras. Esos cargos para nosotros no tiene ninguna validez, desde el punto de vista indígena, porque los mapuches no somos ilícitos, los mapuches  existimos desde hace muchos años, existe nuestro idioma, existen las autoridades originarias, existen las tradiciones de nuestro pueblo y existe una forma organizativa, por lo tanto aquí no es cuestión de que un Estado determinado califique a los indígenas de ilícitos porque desde el punto de vista del derecho indígena los Estados igual son ilícitos en el territorio indígena porque no les hemos dado consentimiento.

 

Para nosotros este es un caso muy aberrante, porque no se está acusando a alguien en particular sino a un pueblo que reclama sus derechos.

 

¿Uds. han logrado la solidaridad de otras organizaciones civiles, sociales de Chile para la causa indígena?

 

Si. Hubo una gran movilización, una gran sensibilización de parte de la sociedad no mapuche en Chile. Hubo grandes movilizaciones de los trabajadores, de las universidades, porque de alguna forma en Chile se ha ido asumiendo este proceso de organización del pueblo mapuche; de alguna forma hemos dado a conocer que somos un pueblo diferente y que sólo aspiramos a que se nos devuelva nuestros derechos, no estamos invadiendo a nadie, no estamos negando a nadie sino que queremos hacer prevalecer y garantizar la existencia de nuestro pueblo, garantizar la existencia de nuestras futuras generaciones y garantizar los derechos mapuches que se encuentran negados.

 

Entonces ha habido una aceptación y eso ha hecho también que hasta el momento la Corte Suprema no dicte todavía orden de detención para nuestra gente sino que lo está haciendo muy sutilmente, para que esto quede entre el sistema jurídico establecido en Chile y los mapuches que están procesados.

 

Justamente ahora nosotros hemos conseguido un abogado no indígena que está llevando la defensa del caso y estamos solicitando una audiencia con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de Washington para llevar este caso a nivel internacional y a instancias internacionales. Esta Comisión ya accedió a darnos la audiencia.

 

El modelo chileno es considerado afuera como el ejemplo del modelo desarrollo neoliberal. ¿Cómo ha afectado este modelo particularmente a los mapuches?

 

Hay una cosa muy interesante aquí, es el hecho de cómo percibe el desarrollo el Estado y cómo lo percibimos los pueblos indígenas, existe como dos visiones de desarrollo: El Estado lo percibe llevando a invertir grandes cantidades de dinero a las empresas transnacionales, dando paso al neoliberalismo, a las multinacionales… mientras que para los indígenas el desarrollo debe ser equitativo, en el sentido de que no se puede haber desarrollo en un país a costa de los pobres, a costa de los indígenas.

 

En esa medida, en Chile se ha ido dando el desarrollo a costa de los pueblos indígenas. Por ejemplo el Mercosur, que es uno de los tratados que acaba de firmar el gobierno, es un acuerdo económico que nos afecta directamente a los mapuches porque nuestras tierras no las tenemos garantizadas como mapuches sino que el Estado es el que tiene una posesión jurídica sobre ellas, eso permite que lleguen grandes cantidades de empresas, de personas particulares con dinero que puedan adquirir nuestras tierras; encima existe una ley de expropiación, es decir, si uno se opone, el Estado le expropia sus derechos y al final le paga una indemnización de acuerdo a lo que él establece. Y lo mismo está sucediendo con el TLC.

 

Pero mientras tanto nuestra situación es cada día más complicada. Nosotros somos alrededor de 600 mil mapuches que estamos ubicados en comunidades, que vivimos colectivamente como parte de nuestra tradición y sin embargo no ocupamos más allá de 150 mil hectáreas de tierra, eso significa que estamos ocupando menos del 0.5 de hectárea de tierra por persona, prácticamente estamos en una situación muy difícil, porque el único elemento que hoy constituye y garantiza la vida para los mapuches es la tierra, entonces como no tenemos tierra no se garantiza la vida y la existencia de los mapuches.

 

De modo que hay dos caras: el Chile de unos pocos, que se da a conocer al mundo, y el Chile de las mayorías, que se lo esconde.

 

Publicado en el Servicio Informativo Nº 239, ALAI, 13-09-1996, Quito

 

https://www.alainet.org/es/articulo/193960
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